Por Julio Cesar Tapia García
Los gobiernos que difunden información falsa sin sustento y fundamento alguno son gobiernos corruptos, falsos e hipócritas, pues al pueblo no más pan y circo, al pueblo se le habla de frente y sin miedo y estas manifestaciones solo son producto de la ingobernabilidad que se vive en el país, pues no hay estado de derecho, que pena por las familias de los cinco estudiantes de la Universidad Latina de México, quienes el pasado tres de diciembre en Celaya, Guanajuato perdieran la vida a quienes López Obrador, les manifestó que su muerte tuvo que ver con el consumo de drogas sin prueba alguna, de lo dicho pena ajena porque, no obstante de tener a su mano a toda la estructura del gobierno, así como a la Fiscalía General de la Republica y del estado, estas hasta el momento no tengan ni la mínima idea de quien, como y porque del crimen, que pena por la figura presidencial que una vez más se ve manchada de ignorancia y arrogancia, por no reconocer que su estrategia abrazos y no balazos en su lucha contra la delincuencia es fallida, que pena por las instituciones que una vez más se ven rebasadas por un vidente quien concluye las razones de muerte de los cinco jóvenes estudiantes que si bien, eran o no consumidores, compradores, esto no es motivo para que se justifiquen sus asesinatos, ojala más aspirantes de estos para las fiscalías, créalo o no, si, tenemos nuestra ’paca’, nuestra panchita Zetina, nuestra vidente profesional, esperemos recaiga en sus manos la investigación de otros crímenes que han ocurrido en este gobierno para acabar con la delincuencia, al diablo las instituciones, los criminólogos, peritos, investigadores y ministerios públicos que solo demuestran ineptitud ante conclusiones contundentes de Obrador, pero lo cierto es que estos gobiernos también buscan chivos expiatorios, mucho ojo, así las cosas.
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